Prosa poética: Sentado en un banquillo a mi reflejo me encontré

Por Yago Salmón De Lucio

Fotografía por Luis Repilloza (2018) instagram: @luisrepilloza 

Sentado en un banquillo a mi reflejo me encontré

Nos arraigamos a la oscuridad, ni filántropos, ¿qué filósofos?. En el pasado mi mente penumbra, rastrillo la pistola, y pienso, quizá lloren, me inunda. Me encuentro sentado, en un banquillo, desubicado, pasa un hombre y pregunta. ¿Qué pasó chiquillo? pensabas que la vida era dulzura. No caigas en eso perro hambriento, lo que buscas es más que un cigarrillo, tienes las preguntas, te falta lo sencillo. Agarra lápiz y martillo, que tallar mis palabras, es de poetas malditos. Capaz e infinito, quizá despierte de un sueño del cual soy convicto. Me interrumpen veloz, no creas que es tan fácil, joven huevón. Pediste estar acá, tu impaciencia gritó. Maldito sin parsimonia. ¡Deja de quejarte de las cosas! abraza tus pecados, invicto sin recados. Deja de llorar por lo que no tienes, apenas aceptes el dolor, tendrás el valor. Ama lo que te rodea, pierde el temor, deja de ser tan frágil, tírate un sermón. Si los balazos te gustan, este es tu regalo, a gatillazos y cátedras, tendrás tu labrado. Así que párate de este cómodo sillón, acepta tu pena, deja el terror. De esta manera comienza apreciar, lo poco que tienes, te lo puedo quitar.

Yago Salmón De Lucio es un escritor peruano de veinte años amante del arte. En la actualidad estudia la carrera de letras en la Universidad de Buenos Aires, Argentina. Es el creador y editor del blog. Instagram: @yagosalmon y @elportadordelapolilla